Un estudio reciente realizado por el Cork Pet Behaviour Centre, un centro de comportamiento y bienestar animal en Irlanda, ha arrojado resultados sorprendentes: abrazar a los perros podría causarles estrés y ansiedad.
Los investigadores analizaron 80 videos que mostraban a personas abrazando a sus perros y descubrieron que la mayoría de los perros exhibían comportamientos que indicaban incomodidad durante el abrazo. Entre estos comportamientos se encuentran:
- Evitar el contacto visual y girar la cabeza (68%)
- Lamedura de labios o nariz (44%)
- Cerrar los ojos (60%)
- Parpadeo (81%)
- Jadeo (43%)
- Mordidas a los humanos (68% en cachorros)
Estos comportamientos son señales claras de que los perros no están disfrutando del abrazo.
¿Por qué los abrazos pueden ser estresantes para los perros?
Los perros comunican su estado de ánimo a través del lenguaje corporal, y las señales observadas en el estudio indican estrés.
Para los perros, ser abrazados puede significar una restricción de su movimiento, lo que puede generar ansiedad. Además, el contacto visual directo puede ser interpretado como una amenaza por algunos perros.
¿Qué podemos hacer como dueños?
Es importante observar el lenguaje corporal de nuestro perro para comprender sus señales. Si un perro muestra signos de incomodidad durante un abrazo, lo mejor es detenerlo y respetar su espacio.
Existen otras formas de demostrar afecto a nuestros perros que no impliquen abrazos, como acariciarlos suavemente, jugar con ellos o pasar tiempo de calidad juntos.
Recordemos que cada perro es un individuo único, y lo que funciona para uno puede no funcionar para otro. Lo importante es ser observadores y respetar las preferencias de nuestro peludo amigo.